Ansiedad temprana: aceptar lo desconocido
En la mayoría de los casos, para una empresaria exitosa que ha dedicado muchos años de su vida a una carrera, la noticia de un próximo embarazo por primera vez trae una mezcla de alegría y ansiedad. En las primeras etapas del embarazo, los pensamientos a menudo pueden derivar hacia el futuro y cómo se verán afectadas tanto su vida profesional como la dinámica de su oficina.
Este período está lleno de preguntas e incertidumbres, por ejemplo, cómo se gestionarán sus responsabilidades en su ausencia, quién se hará cargo de sus funciones actuales, cómo le irá a su equipo sin su liderazgo y, especialmente, los posibles efectos a largo plazo en su trayectoria profesional.
Estos primeros meses están marcados por una planificación meticulosa. A medida que avanza el embarazo, es posible que se encuentre trabajando hasta tarde, tratando de adelantarse a las tareas y proyectos para garantizar una transición sin problemas cuando llegue su licencia de maternidad. Esta fase también es emocionalmente agotadora, ya que navega por la doble identidad de ser una profesional dedicada y una futura madre, y a menudo siente la presión de sobresalir en ambos roles simultáneamente.
Por supuesto, estas emociones se suman a los problemas relacionados con el embarazo, como náuseas, debilidad, cambios hormonales y cansancio. Sin mencionar posibles complicaciones médicas. Todo un viaje que creo que ningún hombre sería capaz de soportar.
Cuenta regresiva: lucha físicas y la realidad de la licencia
Las exigencias físicas se vuelven más evidentes a medida que el embarazo avanza hacia sus últimas etapas. A pesar de su determinación de mantener un desempeño profesional, el cansancio y el malestar físico le pasan factura. Esta parte del viaje a menudo se caracteriza por una carrera contra el tiempo, tratando de completar la mayor cantidad de trabajo posible u organizando las cosas antes de la inevitable salida por maternidad.
La decisión de cuándo finalmente dejar el trabajo está llena de ansiedad. Muchas mujeres ambiciosas retrasan este momento hasta el último minuto, impulsadas por el deseo de que todo esté en perfecto orden y minimizar el impacto de su ausencia. Este período es desafiante, ya que la empresaria equilibra sus limitaciones físicas con sus compromisos profesionales, sintiéndose a menudo dividida entre sus responsabilidades laborales y la necesidad de cuidar de sí misma y de su bebe por nacer.
El regreso de la reina: recuperar el estatus profesional después de la licencia
Volver al trabajo después de la baja por maternidad presenta su propia serie de desafíos. La empresaria se enfrenta ahora a la delicada tarea de equilibrar su ambición con sus nuevas responsabilidades en el hogar. Inevitablemente, a menudo persiste el temor de ser percibida como menos comprometida o capaz debido al tiempo que estuvo fuera. La lucha por recuperar su estatus anterior y demostrar su dedicación puede ser abrumadora, y se ve agravada por la necesidad emocional de querer estar presente para su bebé. Para las mujeres que no pudieron tener un parto natural, esto es aún más desafiante ya que necesitan lidiar con el dolor físico durante varias semanas, lo que las limita.
Esta fase está marcada por un acto de malabarismo constante: gestionar las responsabilidades laborales y al mismo tiempo garantizar tiempo de calidad con su bebé. Pueden surgir sentimientos de culpa y dudas, cuestionándose si ella da lo suficiente a cualquiera de los roles. Sin embargo, es importante recordar que este período de ajuste es temporal. Con tiempo, apoyo y una gestión eficaz del tiempo, es posible encontrar un equilibrio que permita tanto la realización profesional como una vida familiar gratificante.
Reclamando el trono: estrategias para el éxito
Para las mujeres empresarias que enfrentan el doble desafío del embarazo, la licencia de maternidad y el regreso al trabajo, propongo las siguientes sugerencias para navegar esta transición:
- Planifique con anticipación: es un hecho que saldrá de baja por maternidad; por lo tanto, prepárese con mucha antelación. Delegue responsabilidades, establezca expectativas claras con su equipo y asegúrese de que existan sistemas para gestionar su ausencia.
- Comuníquese abiertamente: mantenga abiertas las líneas de comunicación con su empleador y su equipo. Comparta sus planes, inquietudes y cualquier ajuste necesario a su función o horario.
- Busque apoyo: rodéese de una red de apoyo, tanto a nivel profesional como personal. Esto incluye mentores, colegas, familiares y amigos que pueden guiar y ayudar.
- Establezca metas realistas: maneje expectativas; adaptarse a sus nuevos roles puede llevar tiempo. Fíjese objetivos alcanzables para su regreso al trabajo y tenga paciencia consigo mismo.
- Priorice el cuidado personal: Cuide su salud física y emocional. Equilibrar el trabajo y la baja por maternidad es exigente, y mantener el bienestar es crucial para el éxito.
- Busque flexibilidad: si es posible, esté abierta a contratos de trabajo flexibles. Esto puede ayudarle a administrar su tiempo de manera más efectiva y reducir el estrés. Discuta esto con gerencia antes de la licencia de maternidad.
Por sobre todo, disfrute su etapa de madre y recuerde que la transición entre el embarazo, la baja por maternidad y el regreso al trabajo es un cambio importante. Aun así, también aporta nuevas perspectivas y fortalezas que pueden mejorar su vida personal y profesional. Con el tiempo, paciencia y perseverancia, todo encajará, muchas veces mejor que antes. Acepte este nuevo capítulo con confianza, sabiendo que podrá lograr un equilibrio armonioso entre su carrera y su nuevo rol como madre.
El coaching ejecutivo puede ayudarle en las diferentes etapas de esta transición; Si se identifica con alguno de estos pensamientos, no dude en programar una reunión para discutirlo.
Alexander Martinez
